HACIENDO AMOR

Me quemo 

te quemas 

nos quemamos...

Hirviendo en alaridos y saltando con campanas 

me canso... 

y entre besos mojados

cambiamos fragancias, sudores, salivas...

Respiro tu cabello, tu besas mis pestañas

siento cada hendidura de tu piel

cada arteria palpitante.

Grito por dentro.

Tu pierna, mi pierna, tu glúteo y mi cintura, 

torneada en una postura que quema sin sofocar. 

A tal punto la palabra molesta y la fonética no es regla para gemidos.

Cuando me visitas hacia dentro, es velada lenta y tardía

disfrutamos la conversa y no decimos ni pío

solo escuchamos estampidas con pupilas dilatadas.