ME ENCONTRASTE EN MI OLVIDO

Hay fiesta en el cielo 

porque acabo de descubrir 

la felicidad de Dios conmigo. 

He resucitado de espíritu

y también de alma 

pero alma deleitada. 

Volví y siento gozo 

muy parecido al gozo de la ausencia  

pero conmigo. 

Feliz estoy de haber vuelto 

me había perdido y Dios me encontró 

me recogió del piso y  me guardó 

mientras yo me olvidé, él sí recordó. 

Resucité brillante y con rocío  

llena de luces y estrellas 

sin marcas de calle, sin llagas de acera. 

Soy nueva y vestida de oro y plata. 

Por Liliana Romero

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