METISTE TU MANO EN MI PECHO
Metiste tu mano en mi pecho
por la herida de mis melancolías
arrancaste mi corazón sensible
todo herido, casi muerto...
lo exprimiste y lo dejaste tirado
pero no fue tarea fácil
te hizo falta usar ambas manos.
Sin embargo aun vivo, aun palpita
latido a latido y mientras
tus manos yacen sangrientas
en el centro de mi pecho abierto.
Metiste tus pies en mi pecho adolorido
para destruir a patadas mi alma
y te tomó por sorpresa un campo de batalla
con su espada de doble filo
te cortó las intenciones
y caíste moribundo entre mis brazos.
Metí tu cuerpo en mi pecho
el único pecho que tengo
para envolverte de vida
aunque te prefiero muerto.
Por Liliana Romero
Comentarios
Publicar un comentario