LA MASTURBACIÓN EN LA BIBLIA
Un enfoque bíblico
Hablar de la masturbación hoy día sigue siendo un tabú, a pesar de estar en el revolucionario siglo 21, desde el punto de vista religioso, no hemos evolucionado, o más bien, hemos evolucionado hacia atrás o permanecido estáticos. El tema sobre el pecado recibió en sus momentos grandes ataques, provenientes en su mayoría de la abertura científica del ojo humano. Hasta mayoría, el punto de llegar a cuestionar la naturaleza de las religiones e incluso la naturaleza misma existencia de Dios y de su hijo Jesucristo. Pero este comportamiento es el resultado de designar al hombre como pecador por vivir según sus pecador, instintos. Así que, mientras la naturaleza del hombre ha pretendido luchar durante años contra el dogma, para lograr su libertad física y espiritual, la Iglesia en beneficio de su existencia ha satanizado todo empuje hacia dicho logro
Así como el hombre ha mutado para bien a través de los años también ha sido ideado formas de vida acorde con su evolución, así que Dios también ha evolucionado y no sólo eso, para Dios el constante cambio evolutivo es una costumbre, desde la perspectiva legislativa, pero desde su esencia es él mismo, sólo que el hombre a través de sus mortales interpretaciones ha desfigurado de tal forma su imagen y lo que era “imagen y semejanza” se ha vuelto antagonista. Es decir que el hombre ha destruido al Dios semejante y lo ha creado discordante.
En esta era, donde el hombre ha conocido sus capacidades tanto físicas síquicas y espirituales, la imagen de Dios infundada, ha quedado obsoleta, pero esto es el verdadero pecado, haber tergiversado durante años la verdadera intención del Dios amoroso mas haber ejercido, a través de una
ejercido, simulación, la imagen de un Dios castigador e inquisidor. Pero las santas escritura dicen: “Dios es amor”. Este Dios amoroso, hoy pretende ejercer una revolución de conciencias, aprovechando que el hombre ha llegado a un nivel psíquico de comprensión tal, que es capaz de entenderle. Este Dios a través de las enseñanzas de su “yo” hombre; Jesús, y el derramamiento del Espíritu Santo ha comenzado a labrar una forma de Sansón, dispuesto a derribar murallas mal formadas. Murallas edificadas solo con la finalidad de mantener solo un pueblo santo subsumido en la culpa, como la mejor forma de manipulación.
Debemos aplaudir que la existencia de las santas escrituras es muy importante y que de hecho las formas escritas son sinónimo de justicia y seguridad, pero siendo que parte de estas escrituras fueron amoldadas sin autorización de su autor, tal autor hoy unge a sus hijos como escribas para una interpretación de su ley, de forma restrictiva y no ampliada como se ha venido realizando. He de aclarar de antemano que mi intención no es imponer un nuevo orden de pensamiento, más bien quitar la cizaña que no deja leer la verdadera intención de Dios.
La palabra masturbación es definida por el diccionario como: La excitación de los órganos genitales propios (o de otro), usualmente hasta llegar al orgasmo por medio del contacto manual, u otros medios que no incluyen penetración sexual. Incluso puede considerarse masturbación sin relacionarla directamente con el orgasmo. Turbarse con las manos. Este actividad no es exclusiva de sexo alguno, sino evidenciada su práctica en todo tipo de personas sin importar el sexo, aunque es sabido que su práctica es más común en adolescentes en estado de pubertad y mayormente en el sexo masculino.
Uno de los instintos o en energía más importante del hombre es la sexual, instinto necesario para poblar no sólo la tierra, sino para evitar el aburrimiento y soledad de Adán. Dios tuvo una visión, que el hombre poblara toda la tierra, siendo la tierra inmensa en comparación al hombre, imagínense la cantidad de energía sexual que Dios inyectó al hombre. Comparándola con la energía de auto existencia como lo es el comer o el beber, la energía sexual es extraordinariamente inmensa. Además necesaria para Dios, y era tan necesaria que por la desobediencia de Adán, Dios se metió con el alimento de la tierra para saciar su hambre y con la mujer se metió sobre sus partos, pero no con su energía sexual, así que no dijo “y serás eunuco” o “serás maldito por acostarte con mujer” etc., etc. Por ello no creo en satanizaciones ni pecados hechos por mano de hombre y menos por pecados Por otro lado, todos sabemos en cierta forma qué significa masturbarse y el porqué lo hacemos. Cuando estamos jóvenes, es casi incontrolable el desarrollo hormonal y este nos incita a masturbarnos, de est forma liberamos ese exceso de energía. Acotemos, que gracias a la dispersión mundial del catolicismo infundado, las relaciones sexuales infructuosas son pecado, como la fornicación y el adulterio, pero la iglesia se ha empeñado en el celibato perpetuo e incluso prohibir masturbarse. Es decir, ha satanizado vulgarmente lo que Dios ha hecho santo. Porque si recordamos un poco, el castigo en el Edén se debió a la desobediencia y no al sexo. De hecho este tema del sexo, no sé específicamente donde se prohíbe en la Biblia, pues lo que más bien podemos leer es la legalidad de lo contrario. Bien así verificamos la vida de Abraham, Isaac y Jacob, David, Salomón y etc., etc.
El análisis de la vialidad o no de considerar un pecado el instinto sexual y sus prácticas, será motivo de otro trabajo. En esta pequeña guía vamos a tratar de desvirtuar bíblicamente los alegatos que asientan los teóricos católicos y cristianos cuando consideran la masturbación como un pecado y segundo, verificaremos desde la lógica común y la guía del Espíritu Santo qué pasa cuando nos masturbamos y si vamos a ir a quemarnos en el infierno por algo que no tenemos ni la mera culpa de poseer.
En una oportunidad, estando en la Iglesia cristiana evangélica presencié que cristiana los pastores dirigían en su estudio dominical el tema de la masturbación y el sexo, incluso discutían sobre el divorcio. Me llamó poderosamente la atención el hecho de escuchar que era adulterio el separarse de una pareja, que hay que luchar por la unión. Esta parte me pareció justa, lo que no me pareció y no es acorde con un mínimo criterio de lógica e incluso hasta inmoral, si utilizamos su término preferido, que los pastores ya llevaban varios fracasos amorosos e incluso hijos de distinta unión. A veces le doy la razón a Nietzsche. El anticristo no es un hombre sino una manera de actuar contraria a las enseñanzas de Cristo. Así que como dijera el filósofo alemán, en estos casos incoherentes, el cristiano se hace anticristo Leer más anticristo….Leer más…
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El presente análisis es desde la perspectiva cristiana bíblica y tiene como finalidad aclarar a través del estudio exegético de las citas bíblicas, la procedencia o no del pecado de masturbación. Ciertamente, hoy día se hace justo y necesario informar a la juventud cristiana sobre los malos entendidos históricos, justificarlos ante la existencia de dogmas y ataduras teológicas. Haciéndoles comprender la importancia de aceptar la liberación de Cristo.
Este pequeño pero no menos importante estudio pretende despejar al individuo consternado por su debilidad biológica y entregarle las llaves de liberación para que él mismo, en confianza de Dios y con la guía del Espíritu Santo logre separar los grilletes de la ignorancia y aun más, derribar las montañas de la culpa erigidas en su frágil y amado corazón.
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